El otoño, TODO ESTÁ EN TODO

En el antiguo Egipto a los estudiantes, cuando estudiaban la materia, se le enseñaba que el universo y los seres que lo habitan están todos sometidos por las mismas leyes. Todo esta en todo, las leyes universales son las que le dan orden. Acorde a lo anterior, algunas religiones en sus máximas decían: Una justicia perfecta gobierna el mundo. La Naturaleza es obediente con el orden del Universo. El hombre cree estar por encima, y por eso esta chocando continuamente con él, creándose dolor a sí mismo, confusión y caos a su alrededor sin saber su causa, recogiendo los efectos de su ignorancia.

Entonces tenemos que las estaciones están relacionadas con estas leyes,siguiendo un orden establecido, primavera con la infancia, el verano con la juventud, el otoño con la madurez y el invierno con la vejez.  Si aplicamos esta realidad, tenemos que el otoño, en el que nos encontramos, con su caída de hojas nos va indicando el camino a la vejez. Nos enseña la madurez antes del caos, la ralentización de las energías del cuerpo, la ralentización de la savia de los arboles, después de haber cumplido con el fruto. Fruto entendido también como los hijos en el género humano, y las crías en los animales,

El otoño, la estación de los ocres y amarillos las texturas cálidas, de las hojas creando alfombras infinitas, escenificando el declive, la madurez,el camino de la experiencia,la desnudez del espíritu.

Todo esta en todo, ordenado por el mismo ciclo al que llamamos vida, manifestada en la plenitud y el ocaso, el nacimiento y la desintegración, pasando por un aprendizaje, por la experiencia de vivir.

TODO ESTÁ EN TODO

EL OTOÑO