EL GUERNICA

El Guernica es la máxima obra de Picasso, en el cubismo del siglo XX.

Picasso aplica la técnica de la pintura al óleo sobre el lienzo de gran formato, es un cuadro polícromo incluyendo en su paleta los colores: negro, gris, azul y blanco; de esta forma aprovecha al máximo los fuertes contrastes del claroscuro que estos colores permiten.

Picasso usa la técnica del Cubismo Sintético, que consiste en trazar una línea recta a lo largo del cuadro unificando con ella las formas inconexas. La luz en el cuadro es crucial para mostrar el Dramatismo entre los diferentes personajes al estar todos iluminados y juntos en este sufrimiento.

La composición de Guernica presenta 9 personajes: cuatro mujeres, un caballo, un toro, un pájaro, una bombilla y un hombre. Para Picasso las mujeres son cruciales para mostrar el sufrimiento y el dolor.

El caballo herido por una lanza, sufre contorsiones cubistas, de su boca sale un cuchillo que apunta en dirección al toro. El toro es el único que mira al público y se comunica con él. Pablo Picasso hace del toro un recurrente en su iconografía hasta convertirlo en el símbolo del laberinto de su vida. El pájaro está muy sutil entre los dos animales fuertes del cuadro: el toro y el caballo. La bombilla es una especie de ajo con rayos como el sol, preside el conjunto de la escena, pareciendo que observa todos los acontecimientos. El hombre representado por una sola figura en el suelo con los brazos abiertos y fragmentados, empuñando una espada rota junto a una minúscula flor, representando quizás, la esperanza.

El Guernica es la máxima expresión pictórica, seguramente de todo el Arte del siglo XX.