El esfuerzo sigue valiendo la pena.
De nuevo la rutina, el oficio diario que ahora tenemos. Antes teníamos un oficio, una profesión, una licenciatura que nos permitía trabajar y ser útiles a la sociedad y a nosotros mismos. Cada uno tenemos una experiencia acumulada, sabíamos resolver y dirigir, a nosotros mismos y a los demás .De la noche a la mañana, nos convertimos en personas dependientes; dependientes con cierta autonomía más tarde y con el tiempo vamos recuperando grados de funcionalidad y autonomía.